Unificar ,
Esconder, Preparar y
Recorrer.

En el año 1898 Eusebi Güell encargó al arquitecto Antoni Gaudí el proyecto de una iglesia para la Colonia Güell. En el año 1908 se inició la construcción del Templo. No obstante, el ambicioso proyecto que preveía una iglesia con dos naves, inferior y superior, rematada por diferentes torres laterales y un cimborrio central de 40 metros de altura, quedaría inacabado. En 1914 los hijos de Eusebi Güell comunicaron a Gaudí que no seguirían financiando las obras en curso y este tuvo que abandonar el proyecto.
       A la hora de intervenir en un lugar de estas características y ante un edificio como la Cripta Güell, Patrimonio de la Humanidad, definimos la actuación alrededor de 4 conceptos principales: Unificar , Esconder, Preparar  y Recorrer.
     Son dos las tareas encomendadas, definir el recinto del complejo y la construcción del pabellón de entrada. El proyecto debe ser un todo, en forma y materia. No es una acción puntual. Crear la sorpresa de lo desconocido. Se crea un velo que nos oculta lo que está tras de él. La sorpresa posterior será mayor. El pabellón aparece como una serie de 6 paredes. La forma se desintegra; el edificio se convierte en recorrido. El nuevo edificio se convierte en filtro, una preparación para lo visita de la cripta. La atmósfera, los materiales, la luz establecen el tono de la intervención. La capacidad plástica del ladrillo es explotada jugando con diversos aparejos, colores, texturas...

01.      Axonometría conceptual, donde se aprecia la sucesión de muros que componen el recorrido y general el pabellón de acceso a la Cripta Güell.
02.      Imagen perspectiva desde el punto de entrada , el muro de cierre se convierte en el Pabellón de acceso. A su vez, el Pabellón se convierte en Muro.
03.      Planta de la estructura del techo de la Cripta Güell , dibujo Lluís Bonet.